La pérdida de memoria es una situación que solo de pensar en ella atemoriza a muchos. Lo mismo ocurre con el deterioro de las funciones cognitivas. Así las cosas, a medida que se crece en edad, crece también el riesgo de ser vulnerable a este tipo de afecciones. Aun así, si bien este panorama para algunos puede ser desesperanzador, no es del todo irreversible.Según una investigación de la Universidad AlMaarefa en Arabia Saudita, existe una vitamina que puede prevenir que se debilite la cognición y la memoria. Asimismo, esta sustancia puede también ayudar en muchos otros problemas de salud, estén asociados al cerebro o no. Se trata de la vitamina K.Mediante una secuencia de experimentos con roedores, los científicos observaron cuáles eran los efectos de esta sustancia en su cerebro. Entre los resultados, se observó un mejor rendimiento cognitivo, una mejor memoria espacial y una mejora en la capacidad de aprendizaje. A su vez, los investigadores también destacaron la reducción de síntomas de ansiedad y depresión, y, debido a las similitudes entre el cerebro de estos animales y el del homo sapiens, pudieron extrapolar estos resultados al caso de los humanos.A pesar de los cambios producidos por la edad que deterioran la memoria y las facultades cognitivas, todos estos beneficios de la vitamina K se mantenían presentes. Los expertos atribuyen esta resistencia al hecho de que la sustancia provee un efecto contra la inflamación y la actividad antioxidante, los cuales son factores frecuentes en este tipo de enfermedades.Cómo es la vitamina que ayuda a la salud cognitivaUn artículo especializado explica que la vitamina K es un grupo de vitaminas que comparten estructuras químicas similares. En la dieta humana, existen dos formas principales de vitamina K. La vitamina K1, conocida también como filoquinona, es la forma predominante en la dieta y se encuentra en alimentos vegetales como las hojas verdes. Por otro lado, la vitamina K2, o menaquinona, se encuentra en algunos productos animales y alimentos fermentados y también es producida por las bacterias en el intestino. Este segundo tipo de vitamina K es la que los autores del estudio resaltaron como especialmente favorable para la salud del cerebro.El artículo resalta que es importante tener en cuenta que el cuerpo absorbe la vitamina K1 y K2 a diferentes velocidades y que esto puede influir en los beneficios para la salud que cada tipo de vitamina ofrece. De todos modos, a pesar de estas diferencias, ambas formas son solubles en grasa y, por lo tanto, tienden a almacenarse en el hígado y en otros tejidos del cuerpo cuando se consumen.Cómo conseguir los beneficios de la vitamina KEl estudio sugiere que aquellos que deseen obtener los beneficios de la vitamina K pueden comenzar por la configuración de una dieta que contenga más productos con esta sustancia. De esa manera, se podrá incrementar el consumo de alimentos con la vitamina de una forma ordenada e integral.Los alimentos que proporcionan este nutriente son muy variados. De los que provienen de origen vegetal, los expertos primero mencionan a las verduras de hojas verdes, como las lechugas, las espinacas, los brócolis, las acelgas y los kales. Si bien lo hacen en menor grado, los vegetales sin hojas verdes como el coliflor y el repollo también aportan vitamina K. No se debe olvidar tampoco las hierbas, especialmente si se adquieren frescas, como el cilantro y el perejil. Lo mismo puede decirse sobre los aceites de soja, oliva y canola, los cuales tienen altos niveles de la sustancia en su forma de K1.En cuanto a los alimentos de origen animal, hay un nivel similar de diversidad. Los huevos, los quesos fermentados y la manteca proveen vitamina K en su forma de K2. Otros productos lácteos también podrían incluirse en este grupo. La carne vacuna como la de pollo son otras fuentes comunes. De todos modos, las contribuciones que hacen estos alimentos no son tan potentes como las del grupo de origen vegetal.Los otros beneficios de la vitamina KAdemás de los beneficios a la salud cognitiva, la vitamina K también suplementa otras áreas del cuerpo. Según otro artículo especializado en el asunto, los huesos también reciben muchos beneficios cuando se consume esta sustancia. El centro médico de una universidad estadounidense sugiere que la vitamina refuerza el mantenimiento de los huesos fuertes, mejora la densidad ósea y, gracias a ello, reduce el riesgo de fracturas y otras lesiones.Otra dimensión del cuerpo favorecida por la vitamina K es la salud cardiovascular. El mismo artículo reporta que se halló la relación entre la ingestión de la sustancia y el mantenimiento de una presión sanguínea balanceada. Este beneficio se debe a que la vitamina previene la acumulación de minerales en las arterias y, gracias a ello, el corazón puede bombear sangre más libremente. De este modo, se previenen una variedad de enfermedades para el corazón y también se reduce la probabilidad de un paro cardíaco.