En un momento muy delicado para la familia, estando de vacaciones, Cari Lapique no dudaba en coger el primer vuelo disponible para viajar hasta Málaga donde podría despedirse de Caritina Goyanes. Arropada por su familia, llegaba al aeropuerto de Málaga mostrándose gravemente afectada por el fallecimiento de su hija.
Agarrándose de los brazos de su hermana Miriam y de Carla Vega-Penichet, caminaba sin apenas fuerzas por los pasillos del aeropuerto. Intentando mantener la calma pero sin poder evitar sollozar, se apoyaba en sus acompañantes para llegar hasta el exterior del edificio. A su lado, también caminaba Carlos Cortina y otros familiares.
Escondiendo su rostro con gafas de sol, se dejaba llevar hasta el coche que les esperaba en el parking para recogerles en el aeropuerto. El fallecimiento de Caritina Goyanes ha pillado desprevenida a su familia, quienes hace apenas diecinueve días velaba a Carlos Goyanes. Ahora que ha llegado a Málaga, podrá acercarse al tanatorio de San Pedro Alcántara donde recibirá el pésame de su círculo más cercano y podrá despedirse de su hija.