El activista Adrián LeBarón se pronunció ante el posible hallazgo de El Chueco, presunto sicario del Cártel de Sinaloa. Foto: EspecialLa Fiscalía General del estado de Chihuahua confirmó el hallazgo de un cuerpo que coincide con las características físicas de José Noriel Portillo, alias El Chueco, señalado por las autoridades de cometer el doble homicidio de dos sacerdotes Jesuitas y de un guía de turistas.El fiscal General de Chihuahua, César Gustavo Jáuregui Moreno confirmó que se halló el 18 de marzo un cuerpo sin vida, en Choix, Sinaloa, mismo que podría tratarse de El Chueco, presunto sicario del Cártel del Pacífico.En conferencia de prensa, el fiscal detalló que la hermana de este presunto criminal lo habría reconocido, aunque esperan que los resultados de las pruebas de ADN para estar 100% seguros que se trata de Noriel Portillo.La hermana de un líder de una organización criminal acusado de haber asesinado a los dos jesuitas en 2021 identificó un cuerpo encontrado en el norte de México como el de su hermano, según anunció la Fiscalía el miércoles 22 de marzo de 2023. (AP Foto/Fernando Llano, Archivo) (Fernando Llano/)Tras darse a conocer el hecho, el activista Adrián LeBaron comentó en un video que compartió en sus redes sociales que la región donde fueron asesinados los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar ha sido secuestrada por el crimen organizado, “como cientos de regiones del país”.“Los sacerdotes estaban en el poblado Cerocahui, municipio de Urique, Chihuahua. Un lugar que conozco bien, y que es espectacular, pero que como cientos de regiones, ha sido secuestrado por el crimen organizado”, dijo el activista.Adrián LeBaron recapituló lo sucedido el 20 junio del 2022 dentro de la parroquia de San Francisco Javier, en Cerocahui, en la Sierra Tarahumara, Chihuahua.Adrián LeBaron dijo que en la región donde asesinaron a los sacerdotes las controla el crimen organizado. Foto: Especial“El responsable decían que había sido un tal Chueco, y por testimonios de gente de la región, era quien sembraba el terror en la zona”, comentó el activista, y agregó que el presunto culpable del triple homicidio no le tocará pagar en vida sus actos, “pero ahora está en un lugar donde tendrá que rendir cuentas sobre su paso en este mundo”.“Es necesario que las autoridades esclarezcan cuantos muertos y desaparecidos dejó El Chueco, que revelen a las autoridades y funcionarios que le permitieron convertirse en el criminal despiadado que era, que se haga visible su red de corrupción”, comentó Adrián LeBaron.Además, el activista señaló que hay más criminales como El Chueco en todo el país, por lo que espera que las autoridades vayan contra estos delincuentes.Fotografía del 11 de enero de 2020 donde se observa a Adrián y Alex LeBaron en la zona del atentando a su familia, en el municipio de Bavispe, en el estado de Sonora (México). EFE/Daniel Sánchez
(Daniel Sánchez/)“Sobre todo, sabemos que hay muchos chuecos en todo el país, que todos los días extorsionan, secuestran, matan, roba, tratan mujeres y la lista sigue y crece, espero tengan la capacidad de ir contra ellos, porque la omisión también es delito y pecado”, apuntó.Los comentarios de Adrián LeBarón coinciden con el posicionamiento de la Compañía de Jesús en México, comunidad a la que pertenecían los sacerdotes asesinados.“Lamentamos el fallecimiento de la persona cuyo cuerpo fue encontrado por las autoridades de Sinaloa, como lamentamos todas y cada una de las vidas segadas por la violencia que impera en el país”, informaron los Jesuitas en un comunicado.De confirmar que el cuerpo encontrado en Sinaloa es del asesino de los sacerdotes, precisaron los Jesuitas, “su aparición sin vida de ninguna manera puede considerarse como un triunfo de la justicia ni como una solución al problema estructural de violencia en la sierra Tarahumara”.(Comunidad Jesuita de México)Agregaron que sería todo los contrario, “la ausencia de un proceso legal conforme a derecho con relación a los homicidios implicaría un fracaso del Estado mexicano frente a sus deberes básicos y confirmaría que en la región las autoridades no detentan el control territorial”.“Por ello, redoblamos nuestro llamado a que se cumplan a cabalidad las medidas cautelares ordenadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), instaladas apenas la semana pasada, para construir condiciones de seguridad de la región”, expresaron.Señalaron nunca se han callado “ni callaremos ante la violencia y la deshumanización. Seguiremos en la Tarahumara y en otras regiones de México, trabajando para que haya paz, justicia, derechos humanos y reconstrucción del tejido social”.