La petrolera británica BP registró un beneficio neto atribuido de 1.792 millones de dólares (1.627 millones de euros) en el segundo trimestre de 2023, lo que supone un retroceso del 80,6% respecto del resultado récord de 9.257 millones de dólares (8.403 millones de euros) anotado por la multinacional en mismo periodo del año pasado, informó la empresa, que ha incrementado un 10% el dividendo trimestral y lanzará un nuevo plan de recompra de acciones de 1.500 millones de dólares (1.362 millones de euros).
El resultado subyacente de BP ajustado por costes de reposición alcanzó en el segundo trimestre del año los 2.341 millones de dólares (2.125 millones de euros), lo que representa una caída del 69,4% en comparación con la cifra contabilizada entre abril y junio de 2022.
Los ingresos de BP en el segundo trimestre del ejercicio sumaron 49.479 millones de dólares (44.915 millones de euros), un 28,8% menos que en el segundo trimestre de 2022.
De este modo, en el conjunto de los seis primeros meses de 2023 la petrolera británica registró un beneficio neto atribuido de 10.010 millones de dólares (9.087 millones de euros), en contraste con las pérdidas de 11.127 millones de dólares (10.101 millones de euros), del primer semestre de 2022, cuando tuvo que asumir un impacto adverso multimillonario por la situación en Rusia.
En la primera mitad del año, el resultado subyacente ajustado por costes de reposición de BP alcanzó los 11.011 millones de dólares (9.995 millones de euros), frente a las pérdidas de 15.398 millones de dólares (13.978 millones de euros) del primer semestre de 2022.
La cifra de negocio de BP hasta junio disminuyo un 11,8% interanual, hasta 106.430 millones de dólares (96.614 millones de euros). De su lado, la petrolera informó de que a 30 de junio su deuda neta era de 23.700 millones de dólares (21.514 millones de euros), un 11,8% más que al cierre del primer trimestre.
“Nuestro desempeño subyacente fue resistente con una buena entrega de efectivo, durante un período de actividad significativa y márgenes más débiles en nuestro negocio de refino”, declaró Bernard Looney, consejero delegado de BP.
AUMENTA EL DIVIDENDO.
Por otro lado, la petrolera ha anunciado un incremento del 10% en su dividendo trimestral, que alcanzará así los 7.270 centavos por acción ordinaria, además del lanzamiento de un nuevo programa de recompra de acciones propias de 1.500 millones de dólares (1.362 millones de euros).
Al establecer el dividendo por acción ordinaria y la recompra cada trimestre, la junta continuará teniendo en cuenta factores que incluyen el nivel acumulativo y la perspectiva del flujo de efectivo excedente, el punto de equilibrio de efectivo y el mantenimiento de una sólida calificación crediticia de grado de inversión, indicó la multinacional.
En este sentido, BP mantiene sin cambios la orientación sobre futuras distribuciones y, sobre la base de un precio de 60 dólares por barril, espera poder realizar recompras de acciones de alrededor de 4.000 millones de dólares (3.631 millones de euros) al año y tener capacidad para un incremento anual del dividendo por acción ordinaria del orden del 4%.
“Estamos cumpliendo con los accionistas aumentando nuestro dividendo y anunciando una nueva recompra de acciones”, añadió Looney, para quien esto refleja la confianza en el desempeño y las perspectivas de flujo de caja de BP, así como el progreso continuo en la reducción del número de acciones.