Ninguno de los dos jóvenes sabía nadar. Se habían reencontrado con su madre luego de una década.

Ninguno de los dos jóvenes sabía nadar. Se habían reencontrado con su madre luego de una década.
Tras manejar más de 30.000 hectáreas en Argentina y Uruguay, Vicente Leo Martín tuvo que presentar la quiebra de su empresa y aquí comparte su aprendizaje, muy valioso en tiempos de sequía.